viernes, 12 de diciembre de 2008
Sobre el 9 de diciembre: Cesare Pavese
Pareció que los referentes volvían a ser estrellas de esta sesión por encima de su protagonista: “Por los ambientes que retrata, Pavese me recuerda a Faulkner, por su filosofía respecto a la escritura, que no por el estilo, a Hemingway.” No paró aquí la cosa, salió otro: “Faulkner era más rebuscado, Pavese es más lineal, en él no hay tanto artificio, pero su sencillez es engañosa, tras la apariencia popular de sus temas, la simplicidad está muy trabajada. La estructura narrativa, plana, minimalista, me recuerda a Chéjov.”
Sin embargo, muy pronto el italiano impuso su recia personalidad también entre los novelantes. “Pavese es muy difícil de imitar porque habría que imitar al hombre, a la personalidad. Su desolación es inimitable. Es uno de esos escritores de los que salen pocos cada siglo. Su lenguaje es muy sensual, de trazo fuerte y muy poético, y por eso es complicado traducirlo. Él mismo tradujo a los escritores más difíciles de la lengua inglesa, Melville, Dos Passos, Faulkner…”
¿Y su novela De tu tierra, de la que hablábamos? “Se me ha hecho muy larga, es muy densa, he tenido que leerla por etapas”. “El estilo del libro es muy bronco, he tenido la sensación de que no quería llegar a mí como lector”. Debe de ser que Pavese “no recurre a los típicos trucos para enganchar, a personajes con los que identificarse, a anticipaciones”. Ey, “de hecho, sí que acude a la anticipación, al final de la novela, justo antes de que Talino asesine a Gisella, hay una anticipación, un par de párrafos antes, que resulta muy sorprendente, porque no ha acudido a ese recurso en ningún momento, ¿y qué falta hace entonces, cuando ya te tiene pillado?”. Desde luego, “no es buen narrador, no hace bien las anticipaciones, es verdad, pero es que no le interesa”.
¿Y Berto? “El protagonista de la novela, qué personaje más desagradable, se percata de todo lo que se cuece a su alrededor pero se deja llevar y también manejar” Y no sabe evitar que la tragedia se desencadene. Y así, “el sordo duelo de astucias”, como definió Pavese su novela, se resuelve de la peor manera “y te das cuenta, al final, de que estás leyendo otra crónica de una muerte anunciada”, pero sin sentimentalismos esta vez, para qué, “total, sólo es una mujer”. Muy duro, tan duro que se planteó la pregunta de si a Berto se le puede identificar con Pavese: “Considerando que se suicidó, cabe suponer que sí.” Y, sin embargo, “la sorpresa fue que se suicidara”, al menos por lo que respecta a la gloria literaria, la ganó en vida, se trató de un escritor muy popular en su tiempo, muy influyente, y en el momento de su muerte, era firme candidato al Nobel. “Seguramente no lo logró por su militancia comunista”.
De Pavese, pasamos a nobeles que sí llegaron a ser, a la contra o a favor del gobierno de turno, nacional o mundial: Sholojov, Naipaul, Solyenitzin, Coetzee… pero eso es otra historia, ¿quizá otro cartel?
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3 comentarios:
Un muy buen resumen de lo que fue la sesión, lo que sí pediría a los novelantes, en general, es que fuesen más asiduos
Semos pocos, ¡pero valientes!
El resumen, tan interesante como siempre. Y por alusiones: :( :( :(
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