lunes, 25 de enero de 2016

Sobre el 12 de enero: Amor en la juventud

Por fin, este mes hemos encontrado una obra y un autor donde el balance entre críticas y alabanzas está equilibrado. Abrimos el año hablando de Aguas primaverales, de Turguénev. La conversación fue fluida, los acuerdos rápidos, una delicia de tertulia. Esperemos más como esta.

Una mezcla extraña entre lo habitual y lo excepcional
“Su heroe, Sanin, es muy criticado por el autor. Algo que se repite mucho en Turguénev, tratar sobre el hombre superfluo, por no decir inútil”
“Es una novela muy típica del siglo XIX, con descripción a montones”
“El autor es muy habilidoso al describir la naturaleza, cosa que aquí no se da, en este sentido es una novela poco convencional entre las suyas”
“Es una de sus obras menores”
“Solo habla de la naturaleza cuando se produce el duelo”
“Que por otra parte es lógico que acabe como lo hace. Ninguno de los contendientes quiere en realidad batirse”
“Para ser una novela de amor, el amor está casi ausente de ella”
“Es cierto. No hay descripciones amorosas”
“El protagonista se comporta como un adolescente. Su amor está teñido de sexualidad”

¿Autobiográfica? 
“Leyendo la obra intuyes cómo va a acabar y lo pasas mal”
“El tema no está muy desarrollado, debería haberse tomado más tiempo”
“Y es autobiografica. El autor estaba enamorado de una mujer casada y la seguía allí donde fuera”
“No creo que fuera tan autobiográfica. Más bien parece una respuesta a los rumores que habría sobre su relación con una mujer casada. Sanin confiesa que no está enamorado y se siente mal con el adulterio, no creo que le pasara eso al autor”
“Hay cosas que se callan o se dicen oblicuamente. Por ejemplo, la libertad ingenua que siente Sanin y María cabalgando, que precede al momento en que caen en pecado y se siente condenado, y que no se cuenta”
“En conjunto, el comportamiento de Sanin está lleno de connotaciones religiosas”
“Sí, al escoger a María, la mujer casada, escoge el pecado, a la mujer que manda, escoge su propia humillación y rechaza a la casta Gemma”

Protagonistas no retratados y secundarios muy vivos
“La motivación de María, su ansia de libertad, está muy bien descrita”
“Pero el personaje de Gema no está bien delimitado, Sanin mismo casi no la conoce, en cambio sí conoce a María. Conoce su maldad sobre todo”
“Claro, porque es una mujer que en realidad es un hombre, es ella quien lleva los pantalones, por eso la describe bien. Gema, en cambio, es una esfinge sin secreto, un amor platónico”
“El comportamiento de Sanin es absurdo”
“No es absurdo, es un hombre joven e ingenuo, aunque es verdad que las explicaciones están poco desarrolladas”
“Otros personajes secundarios están llenos de vida, como Pantaleone o Frau Leonore”
“Entre los personajes, Pantaleone es el más divertido”
“Pues a mí me parece un poco patético”

Rusia como personaje
“Refleja, con Frau Leonore, el carácter italiano, que tanto sorprendía en la época a los autores anglosajones y del norte de Europa y tantos escritores retratan”
“Es un tópico”
“En cambio, no habla de Rusia en este libro, que era lo típico entre los autores rusos de la época”
“Y se dice que fue algo que lastró su desarrollo como escritor, que se sintió obligado a entrar en el debate entre eslavófilos y occidentalistas”
“Pues yo creo que incluso en este libro habla muchísimo de Rusia, cuando pone una y otra vez a Sanin como un ruso típico”
“A mí me parecen muy graciosas las referencias continuas al carácter ruso, siempre lo hacen. Tuvo que ser una época apasionante en Rusia, vivir aquel contraste de culturas”