domingo, 14 de febrero de 2021

Juan Marsé, El amante bilingüe: Renacimiento

El amante bilingüe

Este mes homenajeamos a un gran escritor fallecido el año pasado, Juan Marsé, comentando El amante bilingüe. ¿Por qué elegir esta obra? Esa fue la primera discusión surgida.

Una trama inverosímil

“Tengo que reconocer que es un libro divertido, que se lee fácil, pero es un poco inverosímil la trama”

“A mí también me lo pareció y no entiendo por qué escogimos esta novela de Marsé. Ya había leído Últimas tardes con Teresa y El embrujo de Shangai y cuando la propusisteis me apetecía más leer otras”

“Bueno, yo la propuse porque trata una temática que me parece más de actualidad que otras suyas, como El embrujo de Shangai, que también me gusta pero trata la postguerra”

“Ah, pues a mí me gustó mucho más El embrujo de Shangai

“Yo no la he leído, pero no sé por qué te parece poco actual la postguerra”

“Bueno, no se trata de eso, tan solo que me parece una buena novela para debatir”

La vida secreta de Norma

“Hay algo en lo que quizá no os hayáis fijado, y es lo importantes que son los nombres de los personajes. Seguramente Norma se llama así por aquel otro personaje llamado Norma que en los años ochenta promocionaba la política de normalización lingüística en Cataluña. Y Faneca, el personaje en el cual se convierte Marés cuando huye de sí mismo, era el apellido del padre biológico de Juan Marsé”

“Ah, ¿es que era adoptado?”

“Sí, de hecho, el apellido Marés también tiene que ver mucho con el Marsé de su padre adoptivo”

“El personaje de Norma no me lo creo, y tampoco el del limpiabotas, no me creo que Norma sienta impulsos sexuales por él”

“Bueno, Norma se siente atraída por hombres de clase baja, incultos. Es como si llevase una pequeña vida secreta, en la vida pública es catalanista y de clase alta, en la privada se acuesta con hombres de clase baja y a poder ser charnegos”

 “Creo que eso es lo que chirría en esta novela, porque ya no responde a la realidad. En Últimas tardes con Teresa el charnego seductor de una catalana de clase alta funcionaba, era creíble, pero aquí no”

La figura del charnego

 “El personaje del charnego, tan recurrente en las obras de Marsé, reflejaba una realidad en la posguerra, pero hoy en día Cataluña ya no es así”

“Claro, es que en Cataluña ya no hay charnegos”

“Ya que estamos hablando sobre Norma, el ultimo polvo entre ella y Marés/Faneca a mí me sobra, no me lo creo”

“Bueno, es una manera del personaje de despedirse de su pasado”

“Pero es revanchista y por eso mismo a mí me sobra”

“En el libro la normalización se ve como una amenaza”

“Sí, eso está claro”

“A mí los letreros que Marés usa en sus jornadas de pedigüeño me parecen graciosos. Están muy impregnados de crítica contra cierto tipo de catalanismo militante. En el libro me hacen gracia pero no creo que nadie en el mundo real recaudase nada con ellos. Es lo que decía antes, me parece inverosímil. Creo que Marsé cae en el mito de que los pedigüeños recaudan mucho dinero y pueden ganarse muy bien la vida, pero no creo que esa visión, que por otro lado está bastante extendida, se corresponda con la realidad”

Guiños a los aficionados a Hitchcock

“Aparte de la trama freudiana, en este libro me ha llamado la atención las muchas referencias a Hitchcock. La idea básica del libro (la doble personalidad del protagonista) me parece una idea copiada de la trama de la película Vértigo”.

“Y supongo que os disteis cuenta de que la última película que Carmen, la ciega, está viendo en el televisor es Encadenados

“Sí, por eso decía que en este libro se nota mucho la filia de Marsé por las películas de Hitchcock”

La simulación, eje de la narrativa de Marsé

“A mí me gustó mucho la transformación de Marés, el protagonista, en un justiciero, como ya se ve cuando venga la soledad de su amigo jorobado”

“Sí, claro, es el preludio de todo un cambio en el personaje. Y desde luego el personaje del jorobado está dibujado desde el afecto mezclado con una pizca de lástima”

“A mí me parece evidente la fascinación que Marsé como escritor siente por el talento para la simulación. Lo he visto en todas las novelas suyas que he leído”

“Estoy de acuerdo, en esta novela, hay que ver, por ejemplo, cómo el padre del protagonista ejerce más como ilusionista que como padre”

“Sí, el libro está lleno de personajes que se transforman en otros personajes. El padre se transforma en un chino ilusionista, el hijo en la araña que fuma y ya cuando es adulto en Juan Faneca, el charnego. Quizá toda su vida es una simulación. Para mí, uno de los mejores momentos de la novela es cuando recuerda su primera visita a Villa Valentí y cómo marca su vida para siempre”

“Aparte de la fascinación por la simulación que comentabas yo creo que Marsé se sentía fascinado por los marginados sociales y por los enfermos mentales. No por los locos agudos pero sí por los trastornados cuyo trastorno les ayuda a sobrellevar la dureza de la realidad”

“Sí, todo eso también se ve en El embrujo de Shangai, por ejemplo”

“Leyendo este libro yo le lanzaría la pregunta de si creéis que a Marsé, en sus últimas obras, le ocurre como a Eduardo Mendoza, que va cayendo en lo chabacano”

“Bueno, digamos que el mejor momento de Marsé, literariamente hablando, no está en sus últimas novelas, sino en las primeras. El libro de este mes se centra más en la aventura y no tanto en la perfección formal y estilística. Literariamente hablando, se le nota el oficio, hay menos cuidado y más ganas de divertirse, algo que también pasa con Mendoza, es cierto”


miércoles, 3 de febrero de 2021

Boris Vian, La espuma de los días: Amor surrealista


En la tertulia de este mes hubo problemas de conexión para algunos de los asistentes, el wifi no es infalible, y la sesión empezó un poco alborotada, un tanto surreal, como el propio libro, La espuma de los días, de Boris Vian. Por suerte, al final las aguas volvieron a su cauce y la tertulia pudo normalizarse.

Boris Vian, polímata

“Boris Vian escribía novela negra, aparte de las obras que, como la que hoy comentamos, eran para él un divertimento, pero hasta donde yo sé se ganaba la vida como ingeniero. Hacía un poco de todo, según la Wikipedia era un polímata, lo cual supongo que viene a querer decir que era un poliartista. Por otra parte, murió joven aunque nos dejó una producción literaria muy estimable”

“Si es verdad lo que dicen las fechas en la novela, la escribió en poquísimo tiempo. Y eso muestra una capacidad literaria impresionante”

“Escribía con un estilo un poco extraño pero que también sigue una larga tradición en la literatura, un estilo cuyas raíces serían el dadaísmo y la patafísica, una disciplina que se inventó Alfred Jarry, el autor de Todo Ubú

“Yo había leído de él el libro Otoño en Pekín. Me pareció en aquel momento un buen ejemplo de literatura abstracta, si es que tal cosa existe. La habíamos comentado en novelantes, aunque aquella vez no tuvo demasiado éxito”

“Yo creo que la obra que nos ocupa este mes es sobre todo surrealista y desemboca en un final digno de Kafka”

“A mí es que me gusta mucho más la segunda mitad del libro, la primera casi que sobra”

“La primera parte también se me hizo pesada”

“Pues yo no estoy de acuerdo. A mí me parece que es una obra con mucho humor”

“Bueno, no es que se me hiciera pesada, sino que me desconcertaba, no sabía adónde quería ir a parar, y por eso la segunda parte la disfruté más. Pero me cautivó desde un principio”

“Yo tampoco quiero decir que no tenga humor, pero es un humor muy cruel y hasta diría que de mal gusto”

“Sí, es un humor que cae conscientemente en el mal gusto. Sobre todo cuando trata algunos temas como la religión y la homosexualidad”

Sartre, la superestrella

“A mí me pareció muy divertido cómo aborda la relación de Sartre (Partre) con sus admiradores y que Alise lo asesine para que su novio no se gaste más dinero en sus obras”

“Vian mismo había colaborado con Sartre y con Camus y yo creo que los admiraba a los dos”

“Siendo como fue discípulo suyo, me parece un poco mezquina la crítica”

“Yo no creo que a Sartre le molestara la parodia, es más, debió gustarle, en realidad, no queda mal como autor, de quien se mofa Vian es de sus seguidores”

“Pues ojalá hoy en día hubiera esa admiración por los filósofos. Yo creo que es algo que ya no se encuentra, ya no se tiene tanto respeto por los intelectuales”

“Bueno, hay filósofos con muchos admiradores, se puede ver en las redes sociales”

“Pero no es comparable al movimiento que generó Sartre en Francia”

“Ya, pero nuestro mundo ya no es el que describe Vian, hay un acceso diferente a la información, mucho más segmentado. Es difícil que surjan fenómenos similares” 

La filosofía es la base y la violencia se cuela en la narración

“A mí me parece que el libro de hoy no deja poso, no tiene estructura”

“Eso también pasa con la poesía y el libro de este mes tiene más que ver con la poesía que con la literatura de tesis como sería, por ejemplo, Dostoievski”

“Es una poesía un poco sádica, hay asesinatos, hay tumbas...”

“A mí me molestaba en algunos momentos la violencia, pero también hay humor en esas muertes. Como la que reserva para el ratón al final, es raro y divertido, como todo el libro”

“Es verdad, el ratón, ¿qué significado diríais que tiene? Es una de esas cosas que me desconcertaron”

“Pues yo diría que es una mascota, sin más, como las de las pelis de Disney”

“Ah, pues sí, no sé por qué le daba yo tantas vueltas. Simplemente es tierno, como ese final que crea para él, para cerrar el libro, esa muerte tan rara que busca el ratón”

“Sí, es un personaje tierno, es un protector de la casa e intenta que recupere aquel brillo que tenía, pero se deja las patitas en el intento. Aquí comenzó a engancharme el libro, cuando empieza la decadencia de la casa, cuando empieza faltar la luz. La casa es cada vez más oscura porque es más pobre. Ahí hay belleza y verdad, así son las casas humildes, la luz es lo primero que falta”

“También hay mucha belleza en la enfermedad de Chloé”

“Sí, hay belleza pero también va siendo todo más siniestro, como los trabajos que tiene que buscar el protagonista para cuidar de Chloé. Habla del trabajo en unos términos tan deshumanizadores que da escalofríos”

“Sí, recuerda a la película Tiempos modernos de Chaplin. Y en el libro también se compara repetidamente al trabajo con la muerte. Es algo que en parte le pasó a Vian cuyo padre era rentista y tuvo que empezar a trabajar por culpa de la crisis económica”

“O sea que esa parte del libro es parcialmente autobiográfica”

“Era una preocupación de la época, hoy ya se ha superado esa etapa de la industrialización. De hecho ahora estamos añorándola porque hemos pasado de que el trabajo deshumanizara a una situación peor, que ya no haya trabajo para todos”